Después del Ensayo, de Igmar Bergman es el montaje en el que podremos disfrutar de la presencia de Emilio Gutiérrez Caba que, a sus 74 años, es uno de los grandes intérpretes de la escena española. La cita será el sábado 14 de abril a las ocho de la tarde
La obra es una reflexión sobre la vida y un homenaje a los actores y directores que aportan sus rasgos a los personajes teatrales. El paso inexorable del tiempo, la decadencia del cuerpo enfrentada a la pulsión de los deseos, la necesidad de actuar por encima de todo y en todos los ámbitos de la vida, los fantasmas de personas y personajes que albergan las paredes del teatro, las relaciones íntimas (incluso familiares) que acaban invadiendo a esos seres que se atreven a representar las emociones y los dilemas humanos frente a otros seres que los observan, empatizan o juzgan.
Con esta obra, el propio Bergman intentaba redimirse, justificarse, explicarse. Toda una vida de éxitos y fracasos, condensada en el momento presente, con sus fantasmas y sus personas de carne y hueso, representadas por la madre y la hija, por los objetos que recuerdan todas sus obras, todas las vidas, y la nueva obra que se vuelve a acometer, esta vez con una joven. Y todo vuelve a empezar…
Chusa Barbero y Rocío Peláez acompañan a Gutiérrez Caba en este montaje dirigido por Juan José Afonso en versión de Joaquín Hinojosa, que a finales del año pasado estuvo en el Teatro Infanta Isabel de Madrid.
Entrada general 14 euros. Reducida 10 euros.
A la venta en la taquilla del Centro Cultural y en www.giglon.com
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